El trabajo permite a las mujeres víctimas salir del círculo de la violencia machista y fortalecer sus derechos.
El trabajo aporta a las mujeres que han sufrido una situación de violencia de género independencia económica, social, psíquica y emocional. Les permite tener ingresos, salir del hogar y de la precariedad, romper con el maltratador, fomentar las relaciones personales, y les proporciona autoestima y seguridad en sí mismas. Resulta esencial para su recuperación contar con la autonomía que proporciona un puesto de trabajo. En resumen, resulta clave para que puedan normalizar sus vidas y sus relaciones.
La empresa juega un papel relevante como generadora de oportunidades laborales.
Desde el Instituto de las Mujeres hacemos un llamamiento a las empresas para que se unan a esta iniciativa, rompan con falsos sesgos y estereotipos que, en muchas ocasiones, les alejan de incorporar el mejor talento, y abran la puerta a la incorporación de mujeres que han sufrido violencia de género a sus compañías. |
Las empresas que estén interesadas en colaborar en la inserción laboral de mujeres víctimas de violencia machista encontrarán en este Manual un procedimiento exitoso a seguir y conocerán las experiencias y valoraciones de otras empresas que ya han incorporado a muchas de estas mujeres a sus plantillas.
0. Introducción
0.2. Red de Empresas por una sociedad libre de violencia de género
1. El porqué de la inserción laboral
1.1. Relevancia de la inserción laboral
1.2. Estereotipos sobre la inserción laboral de víctimas de violencia de género
1.3. Reflexiones y experiencias para vencer los
2. La inserción laboral en acción
2.1. Definir el perfil del puesto de trabajo
2.2. Las entidades intermediarias
3. Claves del éxito